
Andaba con un amigo... es una de esas amistades raras... le llevo 20 años y no lo parece (no me refiero a lo fisico) sino en las vivencias... Mi edad siempre ha sido una enigma... un secreto bien guardado, inutilmente tratan de adivinar y yo me lo guardo. Sin embargo, hace varios días le revelé a mi amigo mi edad y en su mirada vi la delicia de haber descubierto el secreto y en su sonrisa la complicidad... Fue un momento muy lindo... un momento en que de verdad viví el estado mental de la edad.