Qué día más extraño...

Ha sido un día muy extraño... cuando los martes son lunes como que nada cuadra... me invade la tristeza de tantos adios que no sé si pueda aguantar una más... o más bien dos... busco mis respuestas en el mensaje de Dios a través de los ángeles... aun así siento la pesadez del que se tira al mar con zapatos de cemento... mientras... me aquieto esperando... comunicación - debo expresar la sabiduria de mi corazon; libertad - debo permitir que las energías de mi alma fluya y aceptar las situaciones como son...; transformación - debo entregarme a la energía divina para dar lugar a ella; comunión - debo comulgar para que el acto de dar y recibir se transforme en la más íntima comunicación entre dos y síntesis - debo abrir camino para que la intuición me ponga en contacto directo con mi sabiduría interior. Sé que mi mayor desafío es el participar en este momento de transición que antecede una gran revelación - sin temor. Sé que debo abrir mi corazón para dejar que la sabiduría transforme apegos y dudas ya que ésta es una cualidad pura del espíritu... mi espíritu. Sólo así podré ser responsable -no en la forma en que lo conocemos- sino el poder "responder" con amor y reforzar los vínculos de mi energía espiritual. Ahora... después de esta parranda de mi alma... el cemento se volvió arena... la pesadez echó alas y yo estoy lista para caer en brazos de Morfeo... Hasta mañana si Dios quiere.